Centro histórico de Málaga, la magia de la mezcla cultural Málaga, ciudad elocuente como pocas en España, se presenta como una parada imprescindible en tu visita a Andalucía. Bañada por una luz magnética que atrae a pintores y artistas, la cuna de Picasso es hoy en día un trampolín de la gastronomía, la cultura y la historia. Una historia que se personifica en su casco histórico, donde se encuentran concentrados los principales monumentos y sitios de interés de la ciudad, donde conviven las diferentes almas de Málaga: Teatro Romano, el Castillo Musulmán, la Alcazaba, la Catedral y la Judería. Estos son solo algunos de los lugares de interés en el Casco Histórico; el auténtico corazón de Málaga.
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Sobre el centro histórico de Málaga
Entre la magnífica colina del Castillo de Gibralfaro y la Alcazaba se encuentra la zona vieja que acoge monumentos históricos y lugares de encuentro de los malagueños, que viven al ritmo del calor del sol y una buena gastronomía. Si visitas Málaga, este es el epicentro de la visita, donde puedes perderte y pasear en prácticamente todas sus calles peatonales para descubrir todas las caras de la capital. Así, en el caso histórico de Málaga conviven en armonía su ADN cristiano, judío y musulmán a través de los principales monumentos.
Evolución histórica de su urbanismo
El caso histórico de Málaga es un auténtico amalgama de culturas, cuyo urbanismo se ha ido asentando sobre su evolución fenicia, romana, nazarí y burguesa. Esto resulta hoy en día en un casco histórico acondicionado a la época actual, pero manteniendo vestigios históricos imprescindibles.
Ruta por el centro histórico de Málaga
La mejor forma de conocer en centro histórico es paseando y dejándose llevar sin más objetivo que disfrutar del ritmo de sus calles y su gente. Puedes empezar por la Calle Alcazabilla, cerca de la Pirámide de Cristal. Como curiosidad, esta zona se encuentra repleta de anécdotas relacionadas con el hijo predilecto de Málaga: Picasso.
Tras ello, la Iglesia de Santiago Apóstol -donde se bautizó Picasso- representa el estilo medieval en el mestizaje de Málaga. El Pasaje de Chinitas es otro lugar imprescindible para seguir por la Plaza de la Constitución y la Calle Larios, la vía comercial más famosa de la ciudad. Y por último, la Catedral de la Encarnación es una visita imprescindible, donde su fachada guarda en su interior, como no, una mezcla de estilos. El Gótico, Renacentista y Barroco se dan la mano en un marco donde el Altar Mayor es una joya sin igual. Y para hacer un descanso nada mejor que sentarte en cualquiera de sus tabernas o restaurantes a retomar fuerzas. También es recomendable subir a la colina del Castillo de Gibralfaro para tener unas vistas únicas de la ciudad.
Lugares de Interés
- Castillo de Gibralfaro
- Alcazaba
- Calle Larios
- Calle Alcazabilla
- Teatro Romano
- Palacio Arzobispal
- Iglesia de San Agustín
- Iglesia de Santiago
- Teatro Romano
- Catedral de la Encarnación
- Judería
En definitiva, Málaga, con su casco histórico y ritmo vibrante, se presenta como uno de los destinos más interesantes en España. Ven a tomar unas tapas regadas con un vino local nacido bajo el sol único de Málaga, quédate a dormir en un creativo hotel y admira el anfiteatro romano sin olvidar el alma más morisca de Andalucía. Málaga es la elocuencia y la reinvención, como Picasso, y por ello, es un destino que dará mucho que hablar. ¿Te atreverás a empaparte del alma de Picasso? Explora Málaga, un imprescindible en tu ruta andaluza.
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